Una de las canciones más conocidas del cantante italiano de ópera Andrea Boccelli, “Vivo por ella“, tiene una letra que dice: “Vivo por ella sin saber, si la encontré o me ha encontrado, ya no recuerdo cómo fue, pero al final me ha conquistado…. Ella se llama música“. No es una exageración que para muchas personas, la música es su razón de vivir. Lo cierto es que no se requiere ser un cantante de ópera italiano de talla internacional como Andrea Bocelli, para disfrutar y enriquecerse con uno de los artes más ubicuos en la cultura moderna.
La historia de la música data de hace miles de años y ha sido una gran parte de la cultura para las cientos de civilizaciones que han existido. Es inherente a la experiencia humana debido a los enormes efectos positivos que nos brinda.
Los beneficios de la música son increíbles y se dan para todas las edades pero de diferentes maneras.
Para la mayoría de nosotros la música tiene efectos positivos importantes que sin saberlo en muchas ocasiones, nos hacen sentir mejor.
A continuación usted puede ver 4 de los más importantes beneficios que la música tiene para niños y adolescentes:
1. Puede mejorar las habilidades sociales
La música a menudo se toca en grupo y, por lo tanto, se enseñan habilidades de trabajo en equipo para que todos los participantes trabajen juntos en armonía. Trabajar hacia un solo objetivo ayuda a mejorar las habilidades sociales.
“Los niños que participan en la música desarrollan niveles más altos de cohesión social y comprensión de sí mismos y de los demás”, dice la Dra. Alexandra Lamont, profesora de Psicología de la Música en la Universidad de Keele.
2. Refina la disciplina y la paciencia
Aprender un instrumento les enseña a los niños sobre la gratificación retrasada. El violín, por ejemplo, tiene una curva de aprendizaje pronunciada. Antes de poder realizar un solo sonido, primero se tiene que aprender cómo sostener el violín, cómo sostener el arco y dónde colocar los pies, dice Mary Larew, profesora de violín en la Neighborhood Music School en New Haven, Connecticut. Tocar un instrumento les enseña a los niños a perseverar durante horas, meses y, a veces, años de práctica antes de alcanzar metas específicas, como tocar con una banda o memorizar una pieza en solitario. “Las lecciones privadas y la práctica en casa requieren un tipo de atención muy concentrada durante incluso 10 minutos a la vez”, dice Larew. Las lecciones grupales, en las que los estudiantes aprenden a tocar los mismos instrumentos en un conjunto, también mejoran la paciencia, ya que los niños deben esperar su turno para tocar individualmente. Y al esperar su turno y escuchar a sus compañeros de clase tocar, los niños aprenden a mostrar respeto a sus compañeros, a quedarse quietos y callados durante períodos de tiempo designados y a estar atentos.
3. Mejora puntaje en pruebas
Un estudio publicado en 2007 por Christopher Johnson, profesor de educación musical y terapia musical en la Universidad de Kansas, reveló que los estudiantes de las escuelas primarias con programas superiores de educación musical obtuvieron puntajes alrededor de un 22 por ciento más altos en inglés y un 20 por ciento más altos en matemáticas en exámenes estandarizados, en comparación con las escuelas con programas de música de baja calidad, independientemente de las disparidades socioeconómicas entre las escuelas o los distritos escolares. Johnson compara la concentración que requiere el entrenamiento musical con el enfoque necesario para desempeñarse bien en una prueba estandarizada.
Aparte de los resultados de las pruebas, el estudio de Johnson destaca los efectos positivos que una educación musical de calidad puede tener en el éxito de un niño pequeño.
4. En general, mejora las habilidades académicas
La música y las matemáticas están muy entrelazadas. Al comprender el ritmo y las escalas, los niños aprenden a dividir, crear fracciones y reconocer patrones. Parece que la música conecta el cerebro de un niño para ayudarlo a comprender mejor otras áreas de las matemáticas, dice Lynn Kleiner, fundadora de Music Rhapsody en Redondo Beach, CA. A medida que los niños crecen, comenzarán a recitar canciones, recurriendo a su memoria a corto plazo y, finalmente, a su memoria a largo plazo.
Usar un dispositivo mnemónico para hacer esto es un método que luego se puede aplicar a otras habilidades de memoria, dice Mary Larew. Las clases de instrumentos musicales también introducen a los niños pequeños a la física básica. Por ejemplo, tocar las cuerdas de una guitarra o un violín les enseña a los niños sobre las vibraciones armónicas y simpáticas. Incluso los instrumentos que no son de cuerda, como la batería, brindan a los niños grandes la oportunidad de explorar estos principios científicos.
En ISOM, sus hijos se pueden beneficiar con las diferentes actividades y programas musicales que se ofrecen. Desde la iniciación musical en Kínder y Primaria, en donde se ven aspectos como pulso, ritmo, instrumentos de percusión e identificación de instrumentos, hasta formar una verdadera banda de Rock con alumnos de Secundaria.
Se cuenta también con un coro con alumnos de todos los grados. Adicional a todo esto, se tiene la oportunidad de participar en un teatro musical en donde se recrean obras famosas nacionales e internacionales.
La música es el lenguaje más común con el que contamos, y con ella se eliminan todo tipo de barreras. El darle la oportunidad a su hijos que se beneficien estudiando y aprendiendo música, es un increíble regalo que van a disfrutar durante el resto de sus vidas.
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